¿Cómo saber si un percebe es fresco?

El percebe es un marisco delicioso y único. Para asegurar su frescura, busca un aspecto brillante, olor a mar y caparazón duro.

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SaL maRinA | Bloguer
11/04/2023 | Actualizado: 11/04/2023 11/04/2023
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¿Cómo saber si un percebe es fresco?
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¿Cómo saber si un percebe es fresco?

Los percebes son un marisco muy apreciado en la gastronomía mundial, especialmente en países como España y Portugal. Su sabor único y su peculiar aspecto los convierten en un verdadero manjar que todo amante de los mariscos debe probar al menos una vez en la vida. Sin embargo, para disfrutar al máximo de esta delicia, es fundamental asegurarse de que los percebes sean frescos. En esta entrada de blog, te enseñaremos cómo saber que un percebe es fresco, así como otros consejos útiles para su compra y consumo.

Características del percebe fresco

Para identificar si un percebe es fresco, es fundamental prestar atención a algunas características específicas que te ayudarán a distinguirlos de los que ya han perdido su frescura y calidad.

Apariencia: Un percebe fresco debe tener un aspecto brillante y húmedo, sin señales de deshidratación o arrugas. Su caparazón debería ser de un color negro intenso y sin manchas.

Olor: El olor de un percebe fresco es un indicativo importante de su calidad. Debe oler a mar, con un aroma ligeramente salado y fresco. Si percibes un olor desagradable o amoniacal, lo más probable es que el percebe no sea fresco.

Tacto: Al tocar un percebe fresco, notarás que su caparazón es duro y resistente. Si el caparazón se siente blando o flexible, es probable que el percebe esté pasado o en mal estado.

Cómo conservar los percebes frescos

Una vez que hayas comprado los percebes frescos, es fundamental conservarlos adecuadamente para mantener su frescura hasta el momento de su consumo. Aquí te ofrecemos algunos consejos para lograrlo:

Evita lavarlos: Lavar los percebes antes de guardarlos puede acelerar su descomposición. Es mejor guardarlos tal como los compraste y lavarlos justo antes de cocinarlos.

Almacenamiento: Guarda los percebes en un recipiente hermético y coloca un paño húmedo sobre ellos para mantener la humedad. Almacénalos en la parte más fría de tu refrigerador, preferiblemente entre 0 y 4 grados Celsius (32 y 39 grados Fahrenheit).

No los congeles: Aunque congelar los percebes puede parecer una buena idea para mantener su frescura, esto puede afectar negativamente su textura y sabor. Es mejor consumirlos lo más pronto posible, idealmente dentro de las 24 horas posteriores a la compra.

Cómo preparar percebes frescos

Ahora que ya sabes cómo identificar y conservar percebes frescos, es el momento de aprender cómo prepararlos para disfrutar al máximo de su exquisito sabor.

Limpieza: Antes de cocinar los percebes, es necesario lavarlos con agua fría para eliminar posibles restos de arena y otras impurezas. Frota suavemente con los dedos para asegurarte de que estén limpios.

Cocinar al vapor: La forma más común y deliciosa de preparar percebes es cocinarlos al vapor. Para ello, llena una olla con agua y sal, y lleva a ebullición. Añade los percebes y tapa la olla. Cocina al vapor durante 3-5 minutos, hasta que los caparazones se abran ligeramente.

Servir: Retira los percebes del fuego y escúrrelos. Sírvelos en un plato grande y acompaña con un cuenco de agua tibia para que los comensales puedan enjuagar sus dedos mientras los consumen.

Disfruta: Los percebes son mejor disfrutados con las manos, separando el caparazón del cuerpo del percebe y saboreando su jugosa y deliciosa carne.



El percebe es un manjar marino exquisito que vale la pena disfrutar en su máxima frescura. Asegúrate de seguir los consejos que te hemos proporcionado en esta entrada de blog para identificar, conservar y preparar percebes frescos de la mejor manera posible. ¡Buen provecho!